Este juguete fue inventado hace 20 años por Catherine Hettinger, cuando vio a niños arrojando piedras, pensó en un sustituto de esas piedras, que además de tranquilizarles los entretuviera. Catherine expresó en una entrevista:"Empezó como una forma de promover la paz, y después continué buscando algo que fuera muy relajante""Eso era realmente lo bueno de este producto: si caminaba por las oficinas girándolo me calmaba totalmente."
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